Gráfica realizada por Miguel Baeza Torres con nuestros datos.
Es escuchar "La Cabrera" e inmediatamente nuestro cerebro se nos llena de imágenes de dos siglos atrás, y todavía las podemos ver, pero en menos cantidad, ya que el maná convertido en pizarra ha sacado a esta comarca del aislamiento histórico que la convirtió casi en leyenda.
Y gran parte de culpa de ese aislamiento la tiene una orografia simplemente brutal, montañas de cimas suavizas pero con desniveles entre 1000 y 1500m en muy pocos kms convirtieron a La Cabrera en un infierno para conseguir unas vías de comunicación dignas.
Y el encadenado de esas nuevas carreteras es el que nos ocupa; comenzando con el collado Piedrafita, el "San Lorenzo" Leonés por su parecida dureza en su dos vertientes.
Coronaremos este alto de una dureza más que importante para lanzarnos en un breve, pero vertiginoso descenso, en busca de los pueblos colgados de las suaves laderas. Y es al pasar Silván donde regresan las rampas de dos dígitos, por un trazado donde se agarra especialmente la bicicleta. Doblegamos Las Gobernadas y recuperamos fuerzas para la traca final, con rampas que llegan al 15%, las cuales nos separan de la nueva cima de este coloso de 2200m de desnivel acumulado, superando a un tal "Galibier".
Fotos de Javier Rodriguez